martes, 30 de agosto de 2011

Trocitos de nada.



Hay cosas que no me gustan nada, como las abejas, los gallos, o escuchar ruidos extraños cuando estoy sola en casa.

Hay cosas que me dan mucho respeto, como los perros grandes, el mar o mi profesor de Gestión de Alimentos y Bebidas.

Hay otras cosas que me dan miedo, como perder los nervios cuando no concilio el sueño o cuando tengo la sensación de que voy a vomitar.

Son preocupaciones un poco absurdas, ¿verdad?

Pero ahora hay algo a lo que le tengo verdadero pánico.

La soledad.

Me da pavor no tener a nadie a mi alrededor, aunque no me estén prestando atención. Necesito tener a alguien cerca, sentirme protegida y segura de que no me va a pasar nada. De que, si me rompo en pedacitos, alguien va a estar ahí para darme palmaditas en la espalda mientras lloro como un bebé.

Porque siempre me rompo. La soledad me aplasta y me hace sentir débil e indefensa. No puedo luchar contra algo así. La sensación de que no hay nadie para ayudarte si lo necesitas es más dolorosa que una descarga eléctrica.

Y tal y como están las cosas ahora, ¿quién está dispuesto a quedarse conmigo y a consolarme mientras berreo como una niña?

1 comentario:

  1. Siempre voy a estar ahí, idiota. Siempre.

    Tal vez no te pueda dar la palmadita en la espalda ahora mismo, pero aunque ahora no esté, siempre voy a regresar a recoger los trocitos de Rie sueltos por ahí. Sieeeempre.

    Y cuando quedes más o menos como Sally de Pesadilla antes de Navidad, iremos a la heladería chachi a comprarnos un batidazo de kinder y ferrero, o iremos a comer nankima y me vas a echar en cara que sin cebolla no saben a nada. Y nos contaremos nuestras movidas, y nos reiremos y nos juraremos que "¡este año me saco el carnet!" y que "¡este viernes hacemos el FZTH!".

    Así que sal con Davi por ahí, conoce a jodidos personajes dignos de mención, empieza el KH 2 en experto con Charlotte y haz flejemil cosas para contarme en Octubre si vienes o en Noviembre si voy yo. Porque dijimos que íbamos a hacer que la una se sintiera orgullosa de la otra, Rii.

    Y de pocas cosas estoy más orgullosa que de ser tu amiga.

    Te quiero.

    ResponderEliminar

¡Vamos, es gratis y no duele!


¡Gracias por leer hasta el final! ♥